Ver video aquí
Maldita pobreza”, una frase cada vez más común en nuestra sociedad. Lo escucho conversando con amigos en reuniones, por WhatsApp, y hasta Facebook e Instagram, expresado en memes de miles de personas, en forma de broma para no sentirse mal, pero igual dejando el mensaje muy claro: estoy misio. Lo que me preocupa es que no veo a nadie tomando acción para cambiar esta realidad, quedándose muchos en su zona de confort, en estado de pobreza, dejando pasar los años volviéndose cada vez más pobres, cuando debería ser todo lo contrario.
Con pobreza no me refiero únicamente al estado económico, sino también al estado mental de ser pobre, que generalmente van de la mano. Es algo que, a mi opinión, se debe cortar de raíz, ya que es contagioso, como un virus. La misma sociedad pobre te quiere mantener igual que ellos. Con frases como “no seas tacaño”, “para eso trabajas”, y una de las más ridículas: “que pasa si muero mañana y no he vivido nada”, te engañan a vivir una realidad que no es la tuya, gastando igual o más de lo que ganas.
Y con la sociedad no me refiero solo a amigos, familiares también, sobre todo en Latinoamérica. Aquellos que pudieron salir adelante y del cual el resto de su familia se vuelve dependiente, haciéndolo sentir culpable si no paga la enfermedad de la abuela, si no le deposita al hermano que esta sin trabajo, o no paga el colegio o universidad del ahijado por que sus padres no pueden. ¡Hasta he visto padres exigiendo una mensualidad a sus hijos una vez que se independizan! En fin, he visto un poco de todo, y en este artículo he decidido atacar este tema directo a la vena. Acá explico, con 8 simples pasos a seguir, como salir de la pobreza, tanto del estado mental como económico.
1) Cambia de mentalidad
Esta es la más importante de todas, salir de la pobreza mental. Acá se trata más que todo de tomar responsabilidad por tus actos y no creer que eres una víctima. No importa si tuviste la peor infancia, si naciste de una familia pobre, si tu gobierno te obligó a migrar y empezar de 0, si tuviste hijos demasiado temprano, si no tienes un brazo, no importa, no hay excusa para siempre están en posición de víctima. El gobierno no te debe nada, la sociedad no te debe nada, y a la mayoría de personas le llega altamente tus problemas, por que están enfocados en los suyos. Lo sé, es un poco frío, pero cierto, una vez que aceptes esto, créeme que todo se te va a hacer mucho más fácil.
Debes dejar de quejarte y empieza a ocupar tu mente con pensamientos que te hagan salir de esa situación, no que te mantengan ahí con el resto. ¿Qué importa si el gobierno y los congresistas nos roban? ¿Qué importa si cada vez contratan a gente más joven? ¿En verdad te afecta si tu compañero de colegio le esté yendo mejor que a ti? Nada de estas cosas son nuevas y no va a cambiar en absolutamente nada tu situación de pobreza si pones tu energía preciada y pensamientos en eso. Una vez que dejas la envidia, la crítica y las quejas, y te empiezas a enfocar en cosas más positivas, te vuelves una persona mucho más atractiva para el dinero.
También debes dejas de esperar el momento correcto para tomar acción, ya que nunca va a llegar, olvídalo. Posponer las cosas, esperar que lo haga otro primero, o querer que todos aprueben lo que vas a hacer antes que lo hagas, es lo peor que puedes hacer, y te mantendrá paralizado. Ponte una meta clara de salir de la pobreza, toma acción y no mires hacia atrás. Recuerda que no hay nada mejor que el presente para empezar algo, todo se puede aprender en el camino con la práctica y no debes temer al fracaso, o peor aún, temer el que dirán los demás. Muchos ya lograron salir de la pobreza ¿Por qué no también podrías hacerlo tú?
2) Ten clara tu situación actual
Para ponerlo simple, es saber dónde estás parado. Solo debes saber sumar y restar. La idea es calcular cuales son tus ingresos y gastos, nada más. Si usas tu tarjeta de débito o crédito para todo, esto va a ser muy fácil de calcular imprimiendo tu estado de cuenta del banco, si usas efectivo, empieza a anotar todos los gastos que haces en un mes y tenlos bien identificados.
Lo que debes asegurar es que tus ingresos sean mayores que tus gastos, si estás en estado de pobreza, seguro están a la par o tienes gastos mayores que tus ingresos. Lo que tienes que ver acá es que tanta diferencia hay entre ambas, en otras palabras, que tan crítica está tu situación. Si no es tan grave, puede que te salves únicamente rebajando tus gastos. En caso con eso no te alcance, vas a tener que además buscar ingresos adicionales a los que ganas hoy.
3) Rebaja tus gastos

Acá es donde debes aplicar el minimalismo en su máximo punto. Con esto me refiero a comprar o gastar únicamente lo necesario. Pregúntate cosas como: ¿Realmente debes pagar cable si tienes Netflix o Amazon Prime? ¿Es necesario salir a comer todos los viernes con tus compañeros de trabajo cuando puedes cocinar en casa? ¿Puedes quedarte en casa tu semana de vacaciones en vez de viajar? ¿Puedes hablar con ese familiar a quien tanto le envías dinero y decirle que esta vez NO vas a poder ya que necesitas el dinero para ti mismo? ¿Puedes reemplazar las fiestas de fin de semana por un deporte sin costo como salir a correr o calistenia?
Cortar cosas innecesarias no solo te ayudan económicamente, sino también mentalmente. Deshacerse de estas cosas de más es como limpiarte, empezar con el nuevo tu, y aparte mantiene tu hogar mucho más limpio y ordenado, sin tantas cosas que no utilizas. Puede que tus hijos no necesiten tantos juguetes, no necesitas ese adorno nuevo porque salió en oferta, y mucho menos necesites ese Smart TV que ocupa la mitad de tu sala. No compres algo en oferta al menos que lo vayas a revender al precio real inmediatamente. Recuerda que comprar algo en oferta que no necesitas urgente no es ahorro, ¡es despilfarro!